La diputada nacional decidió bajarse de las próximas elecciones y cuestionó duramente la alianza con el oficialismo. Reconoció avances económicos, pero criticó el estilo confrontativo de Milei.
María Eugenia Vidal confirmó que no será candidata en las elecciones legislativas de octubre y se posicionó en contra del acuerdo sellado entre el PRO y La Libertad Avanza. La diputada nacional, que dejará su banca a fin de mandato, argumentó que la alianza es “mala para el PRO, para la gente y para el país”, y aclaró que su decisión no responde a motivos personales, sino a una cuestión de coherencia política.
En una entrevista con el diario Clarín, la exgobernadora bonaerense recordó que ya había anticipado a Mauricio y Jorge Macri que no participaría de la contienda electoral si se concretaba el pacto con el oficialismo. También cuestionó la libertad de acción otorgada por el partido, señalando que “hay que tener identidad y valores e ideas que defender en todo el país”. Pese a las diferencias, afirmó que no abandonará el PRO ni se sumará a otra fuerza política.
Vidal sostuvo que respeta la decisión interna del partido, pero que no la comparte ni la acompaña. En cuanto al gobierno de Javier Milei, le reconoció “el coraje de haber sostenido el equilibrio fiscal” y de haber reducido la inflación, aunque criticó su “insulto y agresión” como método de comunicación, la falta de un presupuesto aprobado en el Congreso y el uso reiterado de vetos presidenciales.
También tuvo palabras para el gobernador bonaerense Axel Kicillof, a quien acusó de seguir apelando al discurso de la “pesada herencia” seis años después de su gestión. Por último, fue consultada por la situación judicial de Cristina Fernández de Kirchner, sobre quien se limitó a afirmar: “Es una política condenada por corrupción después de 15 años de investigación y la intervención de 14 jueces. No tengo nada más para agregar”.





